Con Pemex TRI se ‘sepulta’ el antiguo sector petrolero en México

El antiguo sector petrolero en México llegó hoy a su fin. La extinción de tres subsidiarias que se fusionaron en Pemex Transformación Industrial (TRI), así como un cambio en la perspectiva de la producción, culminaron un paso más en la implementación de la reforma energética.

El director de Pemex, Emilio Lozoya Austin, celebró hoy la culminación de las fusiones que dieron nacimiento a las nuevas entidades energéticas, al señalar que se trata de la mayor reestructura en la historia del sector petrolero mexicano.

La reestructura concentra las subsidiarias paraestatales Pemex Refinación, Pemex Petroquímica, y Pemex Gas y Petroquímica Básica, para crear Pemex TRI, la nueva empresa productiva subsidiaria.

Zyania-Pemex

En su operación, Pemex TRI cuenta con seis refinerías, una flota de 21 buque-tanques; 14 mil 176 kilómetros de ductos y capacidad de almacenar 13 mil 500 millones de barriles de combustibles. Además, tiene bajo su control 70 plantas en 11 centros procesadores de gas; 12 mil 678 kilómetros de ductos gasíferos, y ocho plantas petroquímicas.

A partir de la aprobación de la reforma constitucional en materia energética, así como de un nuevo marco jurídico complementario, producto del Pacto por México que se concretó entre 2013 y 2014, se consideró la reestructura del sector energético con nuevas entidades, un cambio en la definición de los roles, además de la transformación y creación de entidades reguladoras.

El pasado 28 de abril, Pemex publicó en el Diario Oficial de la Federación su nuevo estatuto orgánico y los acuerdos que establecieron la creación de las nuevas subsidiarias Pemex Exploración y Producción; Pemex Transformación Industrial; Pemex Perforación y Servicios; Pemex Logística; Pemex Cogeneración y Servicios; Pemex Fertilizantes, y Pemex Etileno.

Con el nuevo estatuto orgánico se faculta al consejo de administración de Pemex para que designe y remueva a los directores de cada entidad subsidiaria. En el caso de Pemex TRI, el 24 de septiembre el consejo designó a Alejandro Martínez Sibaja.

Como director general de la empresa, Martínez Sibaja sostuvo que Pemex TRI se orientará a los mercados rentables y se dejará a un lado la visión volumétrica.

“No seremos más medidos por los barriles de petróleo crudo procesado, sino por el valor que generemos a Pemex”, se ufanó.

Luego añadió que iniciarán las actividades en todas las áreas de la empresa y delineó sus líneas estratégicas, consistentes en “una operación segura y confiable, con indicadores económicos y de procesos; estrategia y ejecución compartida en corresponsabilidad con la dirección general, y sujetos a rendición de cuentas, y un programa por centro de trabajo que garantice su participación en la solución de los problemas”.

A través de un comunicado, Pemex informó que el reto inmediato es incrementar la eficiencia operativa y estabilizar la operación, mientras a mediano plazo se buscará capturar el máximo valor que ofrece el mercado, así como fortalecer y mejorar la infraestructura para producir mejores combustibles.

Martínez Sibaja llamó a los trabajadores a cuidar las normas de seguridad, al asegurar que su prioridad será la cultura de la prevención con el objetivo de alcanzar la meta de cero accidentes.

En el acto estuvo presente el dirigente del sindicato petrolero, Carlos Romero Deschamps, quien aseguró que sus representados estarán a la altura de las circunstancias.